Servicios Máximos cuando de burocracia se trata. Por Rafael Fenoy

IAM/RF La Consejería dice que establecerá servicios mínimos que velarán por el derecho a la educación recogido en al artículo 27 de la Constitución. ¿Por qué no se dedica a velar a diario por ese mismo derecho a educación? Porque para los políticos del PSOE de la Junta el derecho a la educación sólo existe cuando se le puede hacer la faena a la Junta de dejarla ciega si datos para planificar el curso siguiente.

 

 

 Porque eso es lo que les importa: Hacer que cuadren el número de aulas, el número de clases y el número mínimo de docentes para tener recogidos al alumnado en los centros. A la Consejera de Educación le importa un bledo el derecho a la educación que supone tener suficiente profesorado, bien preparado con experiencia de años y encima estable para que las enseñanzas que recibe el alumnado sean adecuadas. Pero para ella eso no es velar por la calidad de la educación. Vuelve esta señora a confundir, adrede, a sabiendas y eso supone mentir educar con calificar. Porque la evaluación continua sirve para la mejora pero la calificación final sólo sanciona. Sólo negándose a calificar el profesorado interino tiene la oportunidad de “molestar” a los burócratas de la Junta de Andalucía. Porque si la huelga la hacen para no dar clases, como a esos mentecatos les importa un rábano, es el alumnado el que deja de educarse. 

Pero que el hecho de que el profesorado huelguista no de clases les trae al pairo. Cuando la huelga no afecta a calificaciones finales, los servicios mínimos son el director y un conserje. Pero cuando el profesorado puede no dar las notas, entonces, eso es mucho más importante que el garantizar la educación del alumnado mediante el aprendizaje diario. Y es que para estos políticos sin escrúpulos, un acto administrativo es mucho más relevante que el dar las clases a diario. Cuando se pone en peligro el recoger (la administración) las calificaciones, la Junta tiembla, porque no podrán los jugadores a planificar a seguir jugando a las planificaciones. Y ¡oiga! Eso no lo pueden permitir. Si el alumnado se queda sin clase, si las familias sufren un trastorno porque no saben qué hacer con sus hijos e hijas, eso no tiene tanta importancia.

Eso no se puede comparar con el “inmenso” daño que la Junta recibe porque el profesorado no colabora en sus actos burocráticos aportando las calificaciones finales. Por eso, sólo por eso los servicios mínimos serán del 100% de todo el profesorado, para que nadie se escape. A ver como explican tamaño disparate a las familias y al alumnado. La huelga en los juzgados esta paralizando miles de juicios y el derecho a la justicia es otro de los derechos constitucionales. En los juzgados los servicios mínimos, son eso mínimos, para presentar un papel y punto. Fdo Rafael Fenoy Rico 

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